El carbón activo en la industria alimentaria
Aunque el uso del carbón activo en la alimentación data de hace tiempo, aún son muchas las personas que desconocen el papel que desempeña en esta industria.
Sus propiedades permiten adsorber un amplio espectro de moléculas presentes en alimentos tanto líquidos y/o gasificados, por lo que sin duda se ha convertido en un gran aliado.
¿Cómo actúa?
En esa búsqueda constante de ofrecer mayor calidad desde la industria alimentaria, dependiendo del tratamiento que se le dé, el carbón activo puede actuar de diferentes maneras:
- Refinando bebidas alcohólicas
- Eliminando la cafeína del té y el café
- Reteniendo compuestos orgánicos volátiles en gases
- Eliminando sulfhídrico causante de malos olores
- Clarificando productos procedentes de la caña de azúcar
- Eliminando hidrocarburos policíclicos aromáticos en aceites
- Decolorando el glutamato monosódico
- Removiendo el olor y el color de los compuestos de la glicerina
- Eliminando el sabor amargo de ciertos productos y aromas
Algunos usos
En definitiva, acabar con posibles compuestos indeseables, así como mejorar el aspecto e incrementar la calidad es lo que se persigue con el uso del carbón activo en la industria alimentaria. Vamos a ver algunos ejemplos:
- Vinos y bebidas alcohólicas
- Bebidas no alcohólicas
- Zumos de frutas
- Caramelos y golosinas
- Aceites vegetales
En Chiemivall conocemos profundamente el uso del carbón activo en la alimentación, es por eso que podemos ofrecer una amplia variedad de carbones de grado alimentario y en diferentes formas, con el fin de poder cubrir las necesidades específicas de cada uno de nuestros clientes.
Así ponemos toda nuestra experiencia en forma de asesoramiento especializado y personalizado, no solo para el sector alimentario sino también para el sector químico y farmacéutico, para la industria en general o para el tratamiento de aguas y gases.
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